Ayer me preguntaron unos conocidos, sabiendo que me interesa mucho este deporte, que qué pasaba con el balonmano madrileño en particular y el español en general. Hablar de la desaparición del Atlético de Madrid, de los jugadores y jugadoras de la selección que no juegan en España, de que somos bi-campeones del mundo y sólo queda algún cartel perdido hablando del worldhandball 2013 … ya está muy «tocado». La falta de financiación y un marketing poco efectivo puede que estén generando esta situación… Pero mientras hablaba de todo esto pensaba en algo más cercano: en el balonmano de base, en mi club.
Como os he comentado en otras ocasiones formo parte de un club con mucha historia; más por constancia e ilusión que por brillantes resultados. Es cierto que llegamos a estar en Segunda Nacional y hemos tenido equipos en campeonatos de España, pero para un «club de colegio» es más importante estar ahí año tras año que ganar muchos títulos. Este año salimos con nuevos equipos (por fin ponemos equipos femeninos a competir) y con muchas ganas, pero con muchas dudas. Os cuento.
Existen otros deportes además del fútbol. Es obvio, pero ¿no habría que potenciar su práctica? Facilitar un pabellón para un equipo senior de balonmano en Madrid capital es complicadísimo (todo son «pegas»…). Si a eso le sumas que las exigencias normativas, sobre la planificación del horario de los encuentros, puede significar sanciones económicas ante cualquier imprevisto logístico, te piensas «muy mucho» sacar equipos adelante cuando vas justo de «efectivos».
Tenemos pocos jugadores y tenemos escasos medios económicos ¿parece razonable que potenciar nuestro deporte sea poner obstáculos para su práctica y una normativa muy exigente? Los jugadores profesionales no lo son desde que con 6 años cogen una pelota y corretean por el campo de minihandball. Se van haciendo a base de jugar: a veces en equipos con 9 o 10 jugadores en los que la ausencia de 3 por cualquier motivo puede dejarte sin equipo en una jornada. Ahora esta situación, además del trastorno de buscar otra fecha, te acarrea un coste económico.
Facilitar que la base juegue a nuestro deporte debe de estar respaldado desde las federaciones. Los clubes ya ponen los jugadores, la ilusión y una parte económica nada desdeñable. ¿No deberían apoyar los estamentos oficiales, con unas normativas más acordes a la realidad actual, la práctica de nuestro deporte y facilitar el trabajo de los clubes?
El balonmano español se va desinflando. Si los que creemos en este deporte, y los que tienen capacidad de potenciarlo, no buscamos formas de facilitar su práctica ¿quién lo va a hacer?
0 comentarios